A MIS BLOGS

Quiero enviar un mensaje a mis blogs, a mi vida, y a mi pluma; quizá el más corto sea al lugar donde encuentro mi consuelo, tarea difícil, pues cuando al fin logro decir algo con un sentido mágico, el viento de la publicación lo envía al mundo del conocimiento

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¿Y qué es lo que pretendía al gestarlo, sino eso? Quería ver los colores del parto, los sollozos del dolor, y ver la angustia del esfuerzo, y la cara gris de la cinta sin fin de la espera.

El parto tiene el color rojo de la carne, el azul de los suspiros, y el violeta intenso del viento arremolinado antes de la concepción, siempre antes el dulce prado verde de la esperanza.

Primero salta una idea con el chispazo de la voluntad, a veces cristaliza en palabras y nos deslumbra su luz blanca, esperando la magia del gesto, más adelante se desliza un arroyo tranquilo, pero se lanza al abismo imprevisto, y hay que remontarlo a fuerza de nuevas sensaciones, aquí se para.

La gestación modera su impulso, y las ideas, templadas por el deseo de partir se unen para crear un paso en su emoción, esto marcha, no son solo retazos de vida, son miembros de un cuerpo que empieza a definirse, son resultado evidente de que la creación sigue su ruta.

Este paso, y otro, y otro van modelando el resultado de la obra. Una obra siempre causa dolor, ¿Cual? ¿Porqué? ¿Desde? ¿A quien? Hay muchas más causas de dolor, pero es muy complicado definir cada una.

Mi Vida y Mi Pluma solo reciben un único mensaje, la Primera empieza, respira y crece, la Segunda, solo sigue hasta que el aire falta, si tiene vigor y esperanza, si no, la razón falla el Tic Tac del Reloj-Corazón se apaga.

El Dolor del Parto, crea la Obra, y el Mensaje recién nacido se eleva y Cae.